El Puerto
Historia
Aunque se ha encontrado alguna moneda romana en su solar, la más antigua puebla documentada es la que se formó alrededor del pequeño monasterio de San Martín, hacia el año mil, cenobio vinculado al de Santa Maria de Puerto. Con tierras rescatadas a éste último conformó Alfonso VIII la jurisdicción de la villa, a la que otorgó fuero el año de 1200. La actividad pesquera y mercantil marítima, desarrollada por sus vecinos desde entonces, fue la razón y base de su crecimiento y desarrollo, así como fuente de ganancias que permitieron cercar la villa con murallas y levantar la magnífica iglesia mayor gótica.
De 1306 es el documento más antiguo conservado sobre la actividad pesquera en Laredo. Desde entonces, el muy Noble Cabildo de Mareantes Hidalgos de San Martín de la Mar de la villa de Laredo acumuló buen número de privilegios otorgados por los sucesivos reyes. De 1570 es la confirmación por Felipe II de los capítulos de sus antiguas ordenanzas, a los que hicieron adiciones en 1615. En 1828 y 1867 fueron renovadas, adaptándolas a las nuevas circunstancias del siglo.
Pilotos y capitanes aquí nacidos participaron activamente en la gran expansión oceánica con que se inauguró la Edad Moderna. Desde el siglo XV estrechó los lazos con los vecinos puertos aforados, formando la Hermandad de Cuatro Villas, mientras la Corona constituía el Corregimiento de las Cuatro Villas de la Costa de la Mar. Hasta 1570 fue base logística para la formación de armadas reales en el Cantábrico, protegidas por los espigones de sus fuertes muelles. En 1629 logró fijar en su recinto la residencia del corregidor y la recaudación de rentas; diez años más tarde, fue saqueada por la armada francesa. Colmatado progresivamente su puerto de arena, no pudo competir con Santander por la capitalidad. La importante industria conservera que desarrolló en el siglo XIX y la promoción urbanística y turística del XX son algunas de las claves de su recuperación.
Actualidad
La tradición marinera de Laredo ha llegado a nuestros días, y se refleja en la actividad que desarrolla el puerto pesquero de la villa y en el moderno Puerto Deportivo, ambos ubicados en el casco urbano de la localidad y, en uno de los puntos marítimos más estratégicos del Cantábrico, en una zona de resguardo, y a los que se accede por una bocana definida entre el espigón de abrigo y un contradique.
El nuevo Puerto Deportivo de Laredo es una moderna marina, que está llamada a convertirse en una de las grandes instalaciones náuticas del Cantábrico, cuenta con 857 atraques, de ellos, 812 son para alquilar y 45 para tránsito. Los amarres van desde los 7 metros de eslora por 2,8 de manga, a yates grandes de 20 metros de eslora por 6,6 metros de manga. En total ofrece siete tipos de amarres en función de la superficie. Una de sus ventajas es la comodidad de sus pantalanes, con pasillos anchos y grandes que facilitan el amarre.
Cuenta con todos los servicios que requiere una instalación de estas características, entre ellos, un amplio aparcamiento con cerca de 400 plazas, grandes vestuarios y zona de duchas, instalación fija con pantalán para abastecimiento de combustible, travelift con capacidad de carga de 50 toneladas y con unas dimensiones de 26 metros de longitud por 6,10 de ancho, marina seca de casi 4.000 metros cuadrados cubiertos y un área de carena de 3.780 metros cuadrados, entre otros.
Al estar ubicado en el casco urbano de la villa, el Puerto Deportivo de Laredo ofrece todos los servicios externos que pueda precisar el navegante: centros de salud, hospital, restaurantes, playas, zonas de ocio….